A vos muchacho loco que te quedaste dormido y el colectivo pasó lleno. A vos muchacha coqueta que vas a llegar tarde a clase pero ni loca despeinada. A vos que vivís encerrado entre libros, huesos, goniómetros, apuntes y desgrabados. A vos que nunca llegas a punto para el parcial, que te clavaste medio litro de café pero lees siempre la misma frase. A vos que llenas de colores chillones cada renglón de tu apunte, que le pedís desesperado los apuntes chillones a tu amiga.
Ya sufriste el apestoso olor a formol, los incómodos bancos del Clínicas, manchaste la hoja con mate, te tocó desgrabar, te salió la paralela. Pasó el híper, te dieron la beca, hiciste jornadas. Pero no devolviste el libro y te retuvieron el carnet... a GARPAR!!!.
Al fin y al cabo llegó tu primer día de hospital y te quedaste absorto mirando la magneto pensando a cuantos Gauss se usa o tratando de escuchar boquiabierto y con ánimo derrotado un crepitante que nunca llegas a distinguir.
Igualmente no desesperaste, sabias que La Gaceta iba a salir...
Jogo